Comer jamón es un placer al que prácticamente nadie puede resistirse porque su sabor es único en el mundo. Muchos de nosotros hemos tenido que apartarlo de nuestra vista conscientes de que estábamos comiendo de más; sin embargo, ya no tienes de qué preocuparte porque este alimento tiene más propiedades beneficiosas de las que piensas.

En Enrique Tomás, como amantes de este producto y expertos jamoneros que somos, te revelamos los beneficios del jamón ibérico para la salud.

 

El jamón ibérico, un producto de lo más saludable

El consumo responsable de jamón ibérico aporta muchos beneficios gracias a su alto contenido en proteínas, vitamina B y minerales como el hierro o el zinc. Este alimento cuenta con unas propiedades nutricionales de lo más positivas para nuestro organismo.

¡Te contamos en detalle cuáles son en: “Las propiedades nutricionales del jamón ibérico”.

Que el jamón ibérico está buenísimo lo sabemos todos. Pero lo que algunos no saben, es que además posee muchos beneficios para la salud. Algunos de estos beneficios son muy curiosos como que previene la caída del pelo o que facilita la curación de heridas y quemaduras gracias a su alto contenido en zinc. También nos aporta memoria dúctil, rapidez mental, así como una mayor capacidad de concentración y comprensión.

 

¿Por qué el jamón ibérico beneficia la salud cardiovascular?

Es altamente aconsejable para la salud debido a la peculiaridad que tiene la raza ibérica, de la cual procede el jamón ibérico, de poder infiltrar la grasa en las vetas del jamón ibérico.

Particularmente, la grasa del jamón de bellota ibérico contiene más del 50% de ácido oleico que ayuda a la disminución del colesterol, reduciendo el riesgo a enfermedades cardiovasculares como la arterioesclerosis, hipertensión arterial o embolias.

Por ello no nos cansamos de decir que el jamón de bellota comparte los beneficios y propiedades de otros productos autóctonos de nuestro país como el aceite de oliva.

Además, el jamón ibérico es rico en minerales como el hierro que nos ayuda a retrasar el envejecimiento y reduce las posibilidades de tener enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson o Alzheimer.

Otros beneficios curiosos que pocos saben es que aumenta la agudeza del sabor y el olfato, de modo que ya no hay razones en contra para degustar un buen jamón.

 

Un estudio revela que el jamón ibérico ayuda a la presión arterial

En 2015, la Unidad de Endotelio y Medicina Cardio metabólica del Hospital Ramón y Cajal publicó un estudio relacionado con los beneficios del jamón ibérico para la salud.

En este estudio, dirigido por doctor José Sabán, profesor asociado de Medicina de la Universidad de Alcalá de Henares, se comparaban los efectos que producía comer jamón de bellota ibérico en cien sujetos de entre 25 y 55 años y se demostró que comer ibérico de bellota, también conocido como jamón de pata negra, es bueno para la salud cardiovascular.

Las conclusiones del estudio sobre los beneficios del jamón ibérico para la salud

Según el estudio del doctor Sabán, la ingesta de 50 gramos de jamón al día no perjudica a la salud cardiovascular, sino todo lo contrario.

El jamón tiene proteínas, minerales y es rico en antioxidantes y antiinflamatorios, por lo tanto, su consumo de forma controlada es beneficioso para nuestro cuerpo.

Comer jamón, especialmente si este es de bellota, produce una mejora en la presión arterial reduciéndola de manera moderada, porque mantiene saludable el tejido del interior del corazón evitando que la presión de la sangre bombeada por este órgano sea elevada. Por lo tanto, favorece a la circulación de la sangre.

Aunque el jamón contiene grasa, la misma, consumida en su justa medida, no es del todo negativa pues ayuda a liberar las arterias y a favorecer el riego sanguíneo.

Es importante destacar que cuando hablamos de los beneficios del jamón ibérico para la salud nos referimos al jamón propiamente dicho, no a la grasa del jamón.

El jamón tiene que tener grasa porque protege a la carne, pero su consumo no es saludable. Visualiza una loncha, la grasa que tiene infiltrada, esa que ves en medio de cada loncha, es recomendable y le aporta un sabor y textura indiscutiblemente bueno, por tanto, puedes comértela tranquilamente, pero la que está en los bordes, aunque está muy rica, si la tomas en exceso puede ser perjudicial, por eso nosotros aconsejamos retirarla.

 

El jamón ibérico en nuestra dieta

¿El jamón engorda?

Algunas de las discusiones más comunes sobre el jamón y seguir una dieta saludable es la de si el jamón engorda o no. En contra de la idea generalizada, hay que decir que no engorda siempre y cuando se ingiera de forma moderada. Lo perjudicial, al igual que ocurre con todos los alimentos, es abusar.

Como dice el refrán, lo bueno y breve, dos veces bueno. No pasa absolutamente nada si comes un poco de pan con jamón cada día, especialmente si es por la mañana a la hora de desayunar, te proporcionará la energía que necesitas para empezar el día.

Si sigues una dieta para adelgazar, lógicamente tienes que tener en cuenta que la carne de cerdo tiene más calorías que la carne de pavo –por ejemplo– y, por tanto, que el jamón de cerdo aporta más calorías que el jamón de pavo. Aun así, eso no significa que uno sea más saludable que el otro.

A nivel de los valores nutricionales, como pueden ser las proteínas o los minerales, el jamón ibérico aporta niveles mucho más altos y beneficiosos de cada uno.

 

Rollito de calabacin con jamón ibérico

 

El jamón ibérico dentro de una dieta equilibrada

Hay que tener en cuenta que si sigues cualquier dieta con un objetivo concreto, debes consultar a profesionales de la nutrición para que te recomienden sobre los alimentos más adecuados y la combinación más adecuada para ti.

No es lo mismo hacer dieta con un objetivo concreto que simplemente querer llevar una dieta equilibrada y saludable. Para cumplir con este segundo objetivo la clave es preparar recetas donde la base principal sean los cereales y vegetales acompañados por una pequeña cantidad de carne u otros productos animales.

Ingerir grasas cardiosaludables como el aceite de oliva o la grasa procedente del pescado azul, de los frutos secos o de productos como el jamón ibérico de bellota también sería una opción válida y adecuada para mantener una dieta equilibrada.

Finalmente, también hay que tener en cuenta que una de las claves para comer de manera saludable es hacerlo con productos frescos, de temporada y poco procesados.

La dieta mediterránea es una de las más completas y saludables, se trata de una valiosa herencia cultural y representa un estilo de vida equilibrado que recoge recetas, formas de cocinar, productos locales y otras costumbres que benefician nuestra salud.

 

Dieta mediterránea

En resumen, el jamón ibérico tiene muchos beneficios para la salud: mejora la presión arterial, nos aporta proteínas y minerales y no engorda si no lo tomas en exceso.

Puedes incluirlo en las recetas como el condimento ideal de ensaladas, cremas y otros muchos platos. O incluso tomarlo solo como aperitivo o parte de una comida o cena compartida.

Disfrútalo sin preocuparte por tu salud, elige un jamón de calidad como el jamón de bellota ibérico Enrique Tomás y ¡date un capricho siempre que quieras!