¿Se puede llevar embutido a Islandia?
Islandia es uno de los destinos turísticos favoritos de los españoles y, ante la dificultad de encontrar allí nuestros productos estrella y el disparatado precio de la comida en el país, es normal que no hagas más que preguntarte si se puede llevar embutido ibérico a Islandia.
La respuesta es no y en Enrique Tomás te vamos a explicar el por qué.
Por qué no se puede llevar embutido a Islandia
La Iceland Food and Veterinary Authority (MAST) es el órgano encargado de regular la entrada de alimentos en Islandia y según la ley 25/1993 está totalmente prohibido traspasar sus fronteras con huevos crudos, productos lácteos no pasteurizados de más de un kilogramo de peso y con carnes crudas, incluyendo el jamón y todo tipo de embutidos.
No obstante, hay que tener en cuenta que los controles una vez llegas al país no son muy estrictos por lo que no te será difícil escuchar a algún conocido explicar cómo ha conseguido pasar con estos productos en la maleta.
Sin embargo, nuestra recomendación es que, si vas a pasar allí unos días no te arriesgues pero, si vives en la isla y no quieres renunciar a nuestros manjares más exquisitos, te recomendamos que compres algún pack de loncheados de tu producto favorito y que le pidas a un familiar o amigo que te lo envíe.
Como están envasados al vacío, ¡te llegarán en perfecto estado!
Dicho esto, ya hemos explicado qué hacer para tener jamón o chorizo y salchichón en Islandia pero esto no quiere decir que tengas que entrar sin absolutamente nada de comida en la maleta, ya que sí está permitida la llegada de pequeñas cantidades de alimentos procesados o cocinados procedentes de la Asociación Económica Europea (EEA) que aglutina a los países de la Unión Europea junto a Islandia, Noruega y Liechtenstein.
Así pues, si quieres reducir el coste de tu viaje, puedes viajar con jamón cocido, queso en pequeñas cantidades o latas de atún, entre otros alimentos.
Cuando veas el precio de la comida, ¡Lo agradecerás!
Y ¿a qué se debe esta prohibición?
La razón que explica esta prohibición es muy sencilla, proteger a los productos autóctonos de posibles enfermedades y, a fin de preservar las particularidades de la isla, la legislación islandesa es muy estricta con la llegada de productos cárnicos, pero también de pescado o animales y mascotas.
Son tan exigentes con su norma que, como dato curioso, hay una raza de caballo propia del país, el caballo islandés, y una vez se exporta un ejemplar, este no puede volver a entrar en la isla para preservar la pureza de la especie.
Con respecto a la alimentación, hay que tener en cuenta que la regulación existe desde hace casi más de 25 años pero ha sido en los últimos diez cuando ha empezado a tener más protagonismo pues las cifras de turismo en Islandia se han disparado.
En 2016 fue cinco veces superior a la de habitantes de esta nación situándose en 1.767.726 personas y 330.000 respectivamente según el diario El País.
Los ingleses, americanos y rusos fueron los que más visitaron la isla mientras que los españoles ocupamos la décima posición.
Ante el éxito de Islandia entre nuestros connacionales, es normal que no hagamos más que preguntarnos si se puede llevar embutido a Islandia pero, ahora que ya sabes que la respuesta es no, ¡recurre a otras opciones!