Regañás y picos: el complemento ideal para cualquier plato
Hoy os vamos a hablar de un complemento o acompañamiento en nuestra gastronomía que son los picos sevillanos y las regañás. Ambos están hechos de pan super crujiente pero con formas diferentes.
Saborear un buen jamón serrano o un jamón ibérico sin tener a mano unos sabrosos picos para ir aclarando el paladar no es lo mismo. Tampoco es igual degustar un buen paté con o sin regañás artesanas. En general los podemos poner en muchos platos como las cremas de verduras o sopas frías para amenizar el sabor.
Te damos unas pinceladas de su origen y cómo comerlos mejor.
Picos sevillanos: origen y tipos
Origen
El origen de este tipo de pan crujiente con tantos años de historia no es exclusivo de la Península ibérica. Dejar secar el pan para que durara mucho tiempo es una técnica ancestral que especialmente los marineros europeos ya usaban hace siglos para poder almacenarlo durante las largas travesías del Atlántico. Por esta razón, en muchos lugares europeos hay formas de pan seco que se parecen a nuestros picos y regañás, como pueden ser los grissini de Italia, el Knäckebrot alemán, los gressins franceses...Si bien nuestros picos y regañás son exclusivos porque incluyen nuestro aceite de oliva en su receta, dándole su sabor único para acompañar nuestros platos de la dieta mediterránea. Hechos en Andalucía, en la región sevillana mayoritariamente, de ahí el nombre de los "picos sevillanos" al igual que las regañás.
Tipos
En todos los supermercados encontramos diferentes tipos de picos sevillanos y regañás. En forma de dátil, curvos, redondos unidos en forma de anillo que en realidad son más rosquillas pero de textura igual o muy parecida. Sin embargo, como pasa con todo, por muy simple que este complemento alimenticio pueda parecer hay diferentes calidades.
Por ello hacemos especial mención al pico y la regañá gourmet, que se elaboran con ingredientes de la mejor calidad mezclados en un proceso de elaboración muy cuidado y que son los más buscados. En Enrique Tomás no podíamos sino tener los mejores picos del mercado para acompañar nuestro producto rey, el jamón. De hecho es más que un simple acompañamiento ya que entre loncha y loncha, el pico limpia bien el paladar de sal para prepararlo o para degustar el maridaje escogido (vino, cava, cerveza) o para otra nueva loncha.
Nuestros clientes bien lo saben, porque al comprar jamón en nuestra tienda online, nuestros productos los llevan ya de regalo. Es un producto de muy buena calidad para acompañar nuestros productos ibéricos o comidas de elaboración refinada.
Las regañás
Son menos conocidas que los picos pero igual de prácticas para acompañar, especialmente aperitivos cremosos como quesos, patés, mermeladas porque son planas y algo menos crujientes que los picos. La regañá es una especie de torta dura y muy fina de pan, típica de Sevilla y originaria de Alcalá de Guadaíra; su popularidad la ha hecho habitual en otras zonas de Andalucía.
Platos con picos y regañás
La función básica de los picos y regañás es siempre la de acompañar o completar.
Para un plato de jamón, una tabla de quesos o embutidos
Comprar queso curado
Para las ensaladas
Nuestra ensalada Montanera
Para las cremas y sopas
Tenlos siempre en casa, no has de sufrir por si se ponen mal porque duran meses y te servirán para mucho...