Hay muchos factores decisivos a tener en cuenta para conservar el jamón de la mejor manera y que se mantenga en perfecto estado, así sus características organolépticas quedarán intactas durante todo el proceso de consumo.

Por ese motivo, en este post vamos a aclararos cuáles son las claves para disfrutar del auténtico sabor del jamón de la primera hasta la última loncha.

 

Todo lo que debes saber para conservar el jamón

Cuando hablamos de la conservación del jamón debemos tener en cuenta de qué formato se trata. No es lo mismo si compras la pieza entera que si adquieres los sobres de jamón loncheado.

¿Qué debes hacer en cada caso?

 

Si compras la pieza de jamón entera… ¿Cómo debes conservarla y consumirla?

El jamón, al ser un producto alimenticio curado, es fácil de conservar. Aun así, debes tener en cuenta unas medidas básicas para poder conservar su aroma y su sabor durante todo el proceso de consumo.

Sea cual sea el tipo de jamón, Gran Reserva o Ibérico, debes mantener la pieza entera en un lugar seco y fresco y preferentemente colgado.

Hay que tener en cuenta que la pata de jamón que has adquirido, se ha vendido en el momento más óptimo para su consumo, por eso recomendamos que no esperes para consumirla.

Una vez abras la pieza de jamón debes ser consciente que hay que consumirla aproximadamente antes de 21 días. Los días pueden variar según el peso exacto de cada pata. Así, conseguirás que mantenga al 100% su sabor, calidad y propiedades. En verano, si vives en un lugar donde la temperatura sube exponencialmente debes consumirlo en menos de 16 días.

 

Nuestro Jamón Gran Reserva

 

Recuerda que para que un jamón se encuentre siempre en su punto óptimo de consumo hay que cortar lonchas cada día, manteniendo así sus características organolépticas intactas.

Además, ten en cuenta que hay que cortar solo lo que vayas a consumir, no cortes en exceso y lo guardes en la nevera, pues este jamón perderá parte de sus cualidades.

Una de las ventajas más destacadas de comprar el jamón entero es disfrutar del sabor intenso de cada loncha justo después de la experiencia del corte. La inmediatez en su consumo hace que cuando nos llevemos la loncha de jamón a la boca, sea una explosión de sabor en nuestro paladar y que podamos notar todos los matices, el aroma y la textura de ese jamón.

Otro de los puntos clave es poner un paño de algodón (por supuesto limpio y sin pelusas) por encima del jamón cada vez que finalices el cortado.

Este paño debe ser de los que no dejan ir pelusa. Así, evitas que el jamón entre en contacto con la luz y con el aire. Un clásico error es colocar la grasa sobrante del jamón – aquella que retiras al abrir el jamón- por encima para taparlo, haciendo de paño. En este caso la grasa se infiltraría y alteraría el sabor auténtico del jamón.

Otra solución y que nosotros usamos en tienda es poner un film transparente que cubra el jamón y que conserva muy bien su aspecto sin alterar el sabor.

 

Si compras el jamón ibérico loncheado… ¿Cómo debes conservarlo y consumirlo?

Comprar jamón loncheado es una de las mejores maneras de mantenerlo en buen estado durante más tiempo, pero, para hacerlo como es debido, es primordial saber cómo conservar el jamón loncheado, ya sea gran reserva, o ibérico.

En Enrique Tomás, como maestros jamoneros que somos, queremos asegurarnos de que al comer jamón disfrutes de la experiencia que esto supone y por ello te contamos como conservarlo correctamente.

Para conservar el jamón loncheado de la mejor manera, no es necesario guardarlo en la nevera. Bastará con que lo tengas en un lugar seco y frío, como, por ejemplo, la despensa. La temperatura perfecta en la que se debe encontrar es de máximo 15 grados ºC o 59 ºF.

“El tiempo de consumo del jamón cortado aumenta gracias al envasado al vacío”

La finalidad de envasar algún producto alimenticio al vacío, sea el que sea, es retrasar su periodo de caducidad pues, al extraer todo el aire del embalaje, el producto se conserva más tiempo.

En el caso del jamón, hay que tener en cuenta que cuando se empaqueta mediante este proceso, su carne se oscurece, pero al abrirlo y entrar en contacto de nuevo con el oxígeno, recuperará su color habitual.

 

Comprar Jamón Gran Reserva - loncheado

 

Comprar Jamón de Bellota Ibérico Premium-loncheado

 

Comprar Jamón de Campo Ibérico - loncheado

 

Cuando abras un paquete de jamón laminado tienes que dejarlo respirar y no comértelo inmediatamente. Sabrás que el jamón está listo cuando veas que las lonchas se separan las unas de las otras sin ningún tipo de esfuerzo. Ese es el momento perfecto en el que ese producto ha vuelto a recuperar todos sus matices de sabor, textura y aroma.

Cada paquete puede consumirse hasta 90 días después de ser cortado, es decir, que una vez lo compres lo puedes tener hasta tres meses en casa sin necesidad de empezarlo. Pero, una vez lo hagas, es importante que sigas nuestras recomendaciones: si abres un paquete y no te lo terminas, debes guardarlo en la nevera correctamente tapado.

No lo cubras con papel de aluminio, sino con film transparente. El proceso de vacío ya se ha roto por lo que es recomendable que te comas el jamón tan pronto como puedas. Cuando lo saques de la nevera, te recomendamos esperar una hora antes de comerlo, hasta que se encuentre a temperatura ambiente, y luego cuando puedas separar las lonchas fácilmente estará listo para consumir.

En este vídeo encontrarás un resumen de cómo conservar un jamón, sea la pieza entera o los sobres de lonchas envasados al vacío.

 

 

En definitiva, la gran ventaja de pedirlo loncheado es que puedes consumirlo a medida que lo necesites y a lo largo de los tres meses, pero si eres de los más impacientes, y te gusta disfrutar del auténtico sabor del jamón de manera inmediata, lo tuyo es la pieza entera.

Recuerda que si lo compras entero se recomienda consumirlo en unas tres semanas.

Elijas el formato que elijas, en la tienda online de Enrique Tomás encontrarás la mejor calidad ¡Disfruta de la experiencia de comer jamón en cualquier momento!